Es la rama de la osteopatía que equilibra las alteraciones músculo esqueléticas. Se caracteriza por un trabajo dirigido sobre las estructuras articulares, (inicialmente las articulaciones vertebrales, extendiéndose luego a todas las demás). Para entenderlo explicaremos que la pérdida de movilidad de una o varias articulaciones provocan desajustes en el organismo, pudiendo causar diferentes alteraciones.
Estas restricciones de movilidad son perjudiciales para el buen funcionamiento corporal, (la articulación no funciona más en los ejes fisiológicos normales), trayendo tensiones locales o de distancia por medio de las estructuras faciales particulares, (ligamentos, tendones, fascias musculares). Resulta entonces, un estado de desajuste biomecánico perjudicial al funcionamiento general del cuerpo de manera directa (mecánica) o indirecta (por vía refleja).
El osteópata manipulando el sistema músculo-esquelético busca conocer si el sistema de articulaciones y músculos está correctamente alineado, si funciona bien o si por un accidente, una mala posición o la tensión emocional lo han alterado. Mediante estas técnicas muy precisas normaliza las estructuras afectadas para equilibrar y restablecer el buen funcionamiento corporal.
